El presente artículo, siendo el primero tras el periodo estival y como deferencia al lector que se reincorpora al trabajo tras un breve periodo de asueto, no tratará sobre contenido técnico o específico de la plataforma Tirant- Compliancers.
Nuestro objetivo es motivar al profesional del Compliance a que vea el mes de septiembre como una nueva oportunidad de expandir el Compliance entre sus clientes o posibles clientes.
La vuelta a la normalidad laboral debe presentarse como una ocasión propicia para la implementación de programas de Compliance pues, hoy más que nunca, las empresas deben protegerse frente a los riesgos externos e internos que afectan a su actividad.
Entre los principales objetivos de una empresa debe estar el solventar necesidades y, para ello, debe invertir recursos, tiempo y energía. Para que esta importante inversión no pueda verse afectada o, más bien, perjudicada por factores que escapan al control razonable de la empresa, el tener un Compliance debe plantearse como una urgente necesidad.
Los riesgos externos, la mayor de las veces, son imprevisibles y escapan a nuestro control. Sin embargo, los de carácter interno son más fácilmente detectables y cuantificables, por ello, con una actitud diligente por parte del órgano de administración y con el asesoramiento proactivo de los profesionales del Compliance conseguiremos que las empresas estén protegidas y preparadas, de la mejor manera posible, frente a los riesgos.
Desde Tirant Compliancers animamos a los profesionales del Compliance a que no cesen en su empeño de dar a conocer la cultura del Compliance entre el tejido empresarial.